sábado, 9 de octubre de 2010

Cercedilla-Puerto Navacerrada-Cercedilla


03-10-2010: Mountain bike auténtico por la sierra madrileña. Efectivamente, este primer domingo de octubre, el maestro Toni, de “Entreveredas”, por aquello de que se despedía del “foromtb”, nos regaló un rutón de los buenos. Nada menos que: Cercedilla-Pto. Fuenfría (por la Vía XXIV)-Carril del Gallo-Enmaderado-Pto. Navacerrada-Whistler-Cercedilla.
Unos cuarenta amigos acudimos a esta excepcional cita, destacando la numerosa representación vallisoletana, que no quiso perderse la fiesta. Los demás llegamos desde Madrid y provincias limítrofes, conformando –entre todos- una buena selección de bikers.
Si decimos que la ruta sólo fue de 33,5 Km., los no iniciados podrían pensar que se trataba de un plácido paseo por la Sierra, pero al añadir que para cubrir semejante distancia invertimos más de tres horas de pedaleo, se entenderá que no fue así.
El recorrido estaba muy compensado, pues comprendía dos subidas, con sus correspondientes descensos. La primera ascensión discurría por la Vía XXIV (antigua calzada romana), que es el camino más directo para llegar al Puerto de la Fuenfría, pero teniendo que superar pendientes más duras que las de la pista principal. Después, divertida bajada por el Carril del Gallo, aunque no exenta de riesgo, lo que obliga a ir muy concentrados. A continuación, tres kilómetros de carretera nos llevarían hasta la Pradera de la Machorra para, desde aquí, atacar el Enmaderado, la dificultad más seria de la jornada, que nos permitiría llegar al Puerto de Navacerrada (cota de 1.900 m). Luego, descenso muy técnico por el Whistler para volver a Cercedilla. Dada la adversa climatología que nos encontramos en Navacerrada, algunos seguimos los consejos de Toni y le acompañamos en la bajada por el Camino del Calvario, que también tiene su puntito.

II Titán de La Mancha




18-09-2010. Este era mi reto deportivo del presente año. Se trataba de una Marcha de mountain bike por tierras manchegas, en la que había que cubrir la distancia de 222 Km. en una sola jornada. A priori, tenía muchas dudas en cuanto a poder superar dicha prueba, ya que mi récord, hasta la fecha, estaba en algo más de 100 Km. El recorrido, con salida y llegada en Alcázar de San Juan (Ciudad Real), discurriría también por los términos de Quero, Madridejos, Consuegra, Fuente El Fresno, Malagón, Castillo Calatrava La Vieja, Ermita Virgen de la Sierra, Villarrubia de los Ojos, Camuñas y Villafranca de los Caballeros.
Poco después de las cuatro de la madrugada, cuarenta animosos bikers salíamos desde la plaza del ayuntamiento de Alcázar de San Juan en pos del objetivo. Todo iba muy bien hasta que, a las 05:00, en los humedales que hay entre Quero y Madridejos, debido a las abundantes lluvias caídas durante la noche anterior, nos encontramos con los caminos absolutamente encharcados y con mucho barro. En tales circunstancias, era imposible circular con nuestras monturas y tuvimos que emplearnos a fondo para quitar el barro de las ruedas. La Titán de La Mancha hacía honor a su nombre desde el principio. Como consecuencia, el itinerario previsto se modificó ligeramente para evitar más inconvenientes acuáticos. Poco después me doy cuenta de que el cambio delantero no funciona, así que, aprovechando la parada que hacemos en una gasolinera de Villafranca de los Caballeros para lavar las bicis, le comento mi problema al jefe de ruta y, como si estuviera programado, un compañero me da un cable del cambio que llevaba de repuesto para sustituir el mío, que se había partido. Otro titán –nunca mejor dicho- se encarga de montarlo y, en menos de diez minutos, asunto resuelto.
Unos kilómetros más adelante, ya amanecido, nos detenemos en Consuegra (Toledo) donde, previamente, se había concertado el desayuno en un bar de la localidad. A continuación, nos esperaba la subida a los Molinos de Consuegra, primera dificultad montañosa de la jornada, seguida de un descenso muy técnico por trialeras con bastante pendiente. A partir de aquí, nos adentramos en una zona muy bonita de los Montes de Toledo y sufro mi “momento pájara” del día. Tengo las piernas agarrotadas y no consigo seguir el ritmo del grupo. Fue providencial la ayuda de David (un biker de Villacañas) que me obligó a quitarme el chubasquero y me indicó que siguiera su rueda. Esto, unido a sus constantes ánimos, surtió efecto y, poco a poco, empecé a recuperarme. Con compañeros de esta categoría, que te asisten al menor síntoma desfallecimiento, el éxito estaba asegurado.
Especialmente agradable resultó el rato que dedicamos a la comida-picnic, junto al chiringuito situado en las proximidades del Castillo Calatrava La Vieja. Almuerzo tranquilo, que aprovechamos para intercambiar impresiones acerca de la jornada que estamos viviendo. Ya habíamos despachado algo más de la mitad de la ruta y nos disponíamos a afrontar, esperanzados, lo que nos quedaba.
El siguiente hito era la Ermita Virgen de la Sierra (Km. 150) y, desde aquí, nuevamente nos tocaba atacar dos importantes subidas antes de llegar a Villarrubia de los Ojos. Seguidamente, nos encontraríamos con varios kilómetros de pista muy rodadora que nos conduciría hasta Camuñas. Fue en este tramo donde tuvimos que lamentar el percance más serio, pues un compañero enganchó el manillar de su bici con el de otro biker y se fue al suelo, viéndose obligado a abandonar la prueba. Le trasladaron a un centro asistencial y, por suerte, aunque tenía bastantes dolores, las heridas resultaron superficiales.
A los demás, sólo nos quedaban 30 Km. de carretera (preferimos el asfalto para no volver a tener problemas con el barro). Los últimos 15 Km. los hicimos guiados por un vehículo de Protección Civil y escoltados por dos motocicletas de la Policía Local. La entrada en Alcázar de San Juan, a las 21:45, entre aplausos y vítores de la gente, fue muy emocionante. Al final, casi dieciocho horas después de haber iniciado nuestra aventura, habíamos recorrido 230 kilómetros. Ya en la Plaza de España, delante del ayuntamiento, el alcalde de la ciudad contaba, orgulloso, a una reportera de la televisión local las características de esta singular y exigente marcha ciclista.
En definitiva, PRUEBA SUPERADA, pero no lo hubiera conseguido sin el apoyo y aliento de unos compañeros que estuvieron a mi lado en los momentos difíciles. Este es el ambiente predominante en nuestro deporte favorito.

Senda del Oso (Asturias)




25-08-2010. La Senda del Oso en bicicleta. Ya son varios años seguidos haciendo este recorrido, coincidiendo con mis vacaciones veraniegas en el Principado de Asturias. El programa siempre suele ser el mismo: alquiler de bici en el área recreativa próxima al cercado osero, visita a los plantígrados, almuerzo en el restaurante “La Chabola” (Teverga) y regreso, que puede incluir baño en la piscina del complejo lúdico-deportivo de Proaza donde está situado el rent a bike. En ocasiones, también añadimos a la ruta el desplazamiento hasta Quirós para disfrutar de su estupendo embalse. Son 44 ó 54 Km. de suave pedaleo por esta vía verde, por la que años atrás circulaba un tren minero. Esta vez, me acompañaron en la excursión mis amigos Carlos y Falo, de Gijón, con el añadido de Susana, César y de su encantadora hija de siete años, Lucía, valencianos que acostumbran a visitar los predios que fueron de Don Pelayo, y a los que conocimos durante la marcha ciclista. El paisaje y la comida son de primera y, como podéis comprobar, tampoco es difícil hacer buenos amigos. En definitiva, muchos alicientes para deleitarnos con una magnífica jornada de ocio y deporte al aire libre. Para no perdérselo.

Caminata por El Angliru (Asturias)










22-08-2010. Memorable la experiencia de subir (y bajar) el Angliru a pie. Son 25 Km. en total -con un desnivel medio del 10% y máximo del 23,5%- disfrutando de un paisaje extraordinario, aunque desde el Km. 2 hasta el Km. 9, tanto a la ida como a la vuelta, nos acompañó la niebla.
Bajo la sabia batuta de mi buen amigo Julio, experto conocedor de la zona, pudimos disfrutar de una dura pero bonita jornada de trekking, especialmente en lo que a mí respecta, ya que suelo decantarme más por el deporte del pedal. Además, he podido “tomar nota” sobre el terreno de los aspectos más significativos de esta dificultad montañosa para, en un futuro, intentar atacarla con la bici.
Por otro lado, la compañía de Julio –con su habitual socarronería- impagable. El tiempo invertido en los dos trayectos fue de seis horas, paradas incluidas, que no está nada mal. Y la guinda a este día por el monte fue el homenaje que nos dimos los dos “protas”, al regresar a La Vega de Riosa, en un bar-restaurante de la localidad. Por mi residencia fuera de Asturias, es una lástima que no pueda realizar esta excursión más a menudo.

Disculpas

¡Hola, amigos!
Primero de todo, ruego me disculpéis por haberme mantenido ausente de mi blog desde la fecha de su creación, allá por el pasado mes abril. Como sabéis, las nuevas tecnologías ocupan mucho tiempo, quizás demasiado, y frecuentemente nos vemos desbordados. Queremos estar en todas partes... y eso es imposible, al menos para mí.
En adelante, intentaré prestarle más atención a este espacio, que nació con la pretensión de compartir con vosotros algunas de mis experiencias lúdico-deportivas, centradas -sobre todo- en mi afición al mountain bike.
Muchas gracias.

lunes, 19 de abril de 2010

Presentación.

Hola a todos. Como practicante del ciclismo de montaña, decido crear este blog con la idea de haceros partícipes de mis experiencias en este fantástico deporte. Apenas llevo tres años ligado a esta actividad, pero puede deciros que han sido tantos los buenos momentos que me ha procurado, los amigos que he tenido la oportunidad de conocer, los paisajes y parajes que he descubierto a lomos de mi inseparable bicicleta... que parece que lleve mucho más tiempo realizando esta actividad. Así pues, a partir de ahora, intentaré transimitiros -lo mejor que pueda-todo aquéllo que considere digno de ser contado. ¡Bienvenidos al mountain bike!